Como bien sabemos, La Niña ha estado presente desde el segundo semestre de 2020 y hasta la actualidad, con una breve interrupción de condiciones neutrales a mediados de 2021. Pero en general, el fenómeno ha sido muy consistente y este es su tercer invierno del hemisferio norte consecutivo. En el caso de Venezuela, La Niña históricamente nos ha dejado ocurrencias de precipitaciones por encima de lo normal:
Condiciones océano-atmosféricas actuales
La temperatura de la superficie del mar en el Pacífico tropical todavía se encuentra dentro del umbral de La Niña, aproximadamente 1.0 °C más fría que el promedio (esto según datos ERSSTv5 de noviembre pasado). La atmósfera también continúa reflejando la circulación de Walker amplificada de La Niña, con más lluvia que el promedio sobre Indonesia, condiciones más secas que el promedio sobre el Pacífico central y vientos más fuertes, tanto cerca de la superficie como en la alta troposfera, todos observados durante noviembre 2022.
Los vientos Alisios de este a oeste, fluctuaron un poco y se desaceleraron levemente a mediados de noviembre. Dado que estos vientos provocan surgencias, su desaceleración puede haber contribuido al ligero debilitamiento de la anomalía de la temperatura de la superficie del mar. En general, el sistema acoplado océano-atmósfera continuó reflejando condiciones de La Niña.
¿Qué se pronostica respecto a La Niña?
Los pronósticos del Instituto Internacional de Investigación de clima y sociedad indican que La Niña persistirá durante el invierno del hemisferio norte 2022-23. Para el promedio de los modelos dinámicos, se observa un probable escenario de condiciones ENSO-neutral entre enero-marzo 2023 (sin El Niño ni La Niña), y en lo que respecta a los modelos estadísticos la transición a ENSO-neutral ocurriría entre febrero-abril 2023.
Ahora bien, el consenso de los pronosticadores, quienes toman en cuenta el Conjunto Multi-Modelo Norteamericano (NMME por sus siglas en inglés), está dividido en si La Niña o ENSO-neutral prevalecerán durante enero-marzo 2023. Independientemente, existe confiabilidad alta en que ENSO-neutral surgirá durante la primavera del hemisferio norte.
¿Es posible la ocurrencia de El Niño en 2023?
Los modelos se han mantenido indicando probabilidades por debajo de un 50% de que ocurra un eventual fenómeno El Niño en 2023, lo cual, desde mi punto de vista, representa una amplia incertidumbre aún para asegurar la consolidación de esa variable climática para el próximo año. En tal sentido, es recomendable continuar monitoreando las tendencias en estas predicciones, antes de tomar decisiones inoportunas. El Niño, en el caso de Venezuela, ocasiona lo contrario al escenario que hemos tenido en los últimos años, es decir, nos trae déficit de precipitaciones en varias regiones del país.
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