29 de marzo de 2024

Meteorología por Luis Vargas

Clima y tiempo al alcance de todos

El siglo XXI cuenta con 13 de los 14 años más calurosos jamás observados

El siglo XXI cuenta con 13 de los 14 años más calurosos jamás observados. El récord lo tienen 2010 y 2005 (+0,55 C), seguidos por 1998, marcados por un fenómeno de calentamiento de El Niño muy poderoso. El año 2013 ha sido uno de los diez años más cálidos desde que se iniciaran los registros modernos en 1850, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Junto con 2007 ha sido el sexto año más cálido, siendo las temperaturas mundiales de la superficie del océano y de la tierra superiores en 0,50°C (0,90 °F) a la media de 1961-1990 y en 0,03°C (0,05°F) a la media decenal más reciente de 2001–2010.

Anomalía de la temperatura media mensual (°C). Fuente: OMM
Anomalía de la temperatura media mensual (°C). Fuente: OMM

El fenómeno de calentamiento de El Niño y el fenómeno de enfriamiento de La Niña son factores determinantes de la variabilidad natural del clima. En 2013 no se dio ninguno de los dos, siendo un año más cálido que 2011 o 2012, en que La Niña trajo aparejado un efecto de enfriamiento. El año 2013 fue uno los cuatro más cálidos con condiciones neutras, es decir, sin episodios de El Niño ni de La Niña. “La temperatura mundial para el año 2013 es congruente con la tendencia al calentamiento a largo plazo”, dijo el Secretario General de la OMM, Michel Jarraud. “El ritmo del calentamiento no es uniforme, pero es innegable que se trata de una tendencia predominante. Dado el volumen sin precedentes de gases de efecto invernadero en la atmósfera, las generaciones venideras vivirán en un mundo en que las temperaturas mundiales continuarán aumentando”, añadió el señor Jarraud. “Nuestra acción —o inacción— para reducir las emisiones de dióxido de carbono y otros gases que retienen el calor determinará el estado en que nuestros hijos, nietos o biznietos encontrarán el planeta”, manifestó el señor Jarraud.

Anomalía de la temperatura mundial (ºC) con respecto a 1961-1990. Fuente: OMM
Anomalía de la temperatura mundial (ºC) con respecto a 1961-1990. Fuente: OMM

La temperatura de la superficie es una de las variables meteorológicas y climáticas más conocidas y medidas sistemáticamente, y es la que guarda una relación más directa con el cambio climático a largo plazo. No obstante, tan solo forma parte de algo con un alcance mucho mayor. Más del 90 por ciento del exceso de calor causado por las actividades humanas está siendo absorbido por los océanos. La OMM dio a conocer los datos sobre las temperaturas como adelanto de la versión completa de su Declaración sobre el estado del clima de 2013, que se publicará en marzo de 2014. En ella se especificarán de forma más detallada las temperaturas, las precipitaciones, las inundaciones, las sequías, los ciclones tropicales, la cobertura de hielo y el nivel del mar a escala regional. Actualmente, la OMM está recopilando información de sus 191 Miembros sobre las tendencias y los fenómenos extremos a escala nacional en 2013. A diferencia de en 2012, en que se observaron temperaturas máximas anuales sin precedentes, en particular en Estados Unidos de América, en 2013 las temperaturas altas más extremas se registraron en Australia, donde se dio el año más caluroso del que se tenga registro. El análisis de las temperaturas mundiales que realiza la OMM se basa principalmente en tres conjuntos de datos complementarios independientes que mantienen al día el Centro Hadley de la Oficina Meteorológica de Reino Unido y la Unidad de Investigación Climática de la Universidad de East Anglia de Reino Unido (conjuntamente); el Centro Nacional de Datos Climáticos (NCDC) de la Administración Nacional del Océano y de la Atmósfera (NOAA), y el Instituto Goddard de Investigaciones Espaciales (GISS), cuyo funcionamiento está a cargo de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA). Estos conjuntos de datos utilizan métodos de cálculo ligeramente distintos, por lo que la clasificación de las temperaturas establecida para 2013 con cada uno de ellos fue diferente, pero denotaba coherencia en los cambios interanuales y las tendencias mundiales al calentamiento a más largo plazo. La OMM consolida estos conjuntos de datos con el fin de proporcionar cifras únicas y consolidadas sobre las temperaturas. La Organización también usa datos basados en los reanálisis del Centro europeo de predicción meteorológica a medio plazo (CEPMMP), que mostraron que las temperaturas mundiales anuales de la superficie del océano y de la tierra son las cuartas más elevadas de las que se tienen datos. Solo en las superficies terrestres del mundo, la temperatura mundial de 2013 fue superior en torno a 0,85°C a la media de 1961-1990 y en aproximadamente 0,06°C a la media de 2001−2010. Se trata de la cuarta temperatura más cálida de la que se tiene registro, debido en parte a un período muy cálido de noviembre a diciembre. En 2013, mientras predominaban unas condiciones neutras, se observó un calor excepcional en la Gran Bahía Australiana y sus aguas adyacentes, partes del noreste y el centro sur del océano Pacífico y en gran parte del océano Ártico, y la temperatura en la superficie de los océanos mundiales fue la más alta desde 2010. Junto con 2004 y 2006 fue el sexto año más cálido del que se tenga registro, situándose en 0,35°C por encima de la media de 1961-1990 y siendo igual a la media más reciente de 2001−2010.

Fuente: Comunicado de prensa N° 983 de la OMM